Un león viejo y débil finge estar enfermo para atraer a otros animales a su cueva y devorarlos. Cuando el zorro llega, se detiene fuera de la cueva y observa que solo hay huellas de entrada, pero no de salida. Al darse cuenta de la trampa, el zorro se niega a entrar, burlando así los planes del león. La astucia del zorro le salva la vida.